top of page

CEREMONIAS DE CACAO

Actualizado: 5 abr


El regalo de Quetzalcóatl

Según la mitología mexica, el dios Quetzalcóatl, deidad de la vida y la sabiduría, robó el árbol de cacao del paraíso de los dioses y lo trajo a la Tierra para ofrecérselo a la humanidad. Pidió a Tláloc, dios de la lluvia, que lo regara para que creciera, y a Xochiquétzal, diosa del amor y la belleza, que lo adornara con flores.


Las abuelas en México nos dicen que esta planta se trajo de las pléyades para que nunca se perdiera la conexión entre  divinidad y el ser humano, a través del corazón.


En la tradición Maya, no solo era sustento, sino un puente hacia lo espiritual. Se cuenta que después de crear a la humanidad a partir del maíz, el dios Kukulkán les otorgó el cacao como regalo divino. Este fruto simbolizaba la riqueza, la prosperidad y el vínculo entre los humanos y las deidades.En la actualidad, las ceremonias de cacao están resurgiendo. En este artículo, exploraremos su historia, sus propiedades y cómo podemos honrar verdaderamente esta medicina de la tierra.


El espíritu del cacao es conocido en las tradiciones indígenas mesoamericanas como "Chocojaguar" o "El espíritu del Cacao", aunque en diferentes culturas puede recibir distintos nombres. En la cosmovisión maya, el cacao es visto como un ser vivo con conciencia propia, un regalo sagrado de los dioses para abrir el corazón y conectar con la energía de la Tierra.


El Origen Sagrado de las Ceremonias de Cacao

El cacao lo empezaron a cultivar pueblos Toltecas originarios de Mesoamérica y era un alimento sagrado, utilizándose en diversas ceremonias de trascendencia. Los abuelos y abuelas mayas lo usaban y lo usan también en rituales de nacimiento, bautizo, uniones y también en despedidas de un ser querido que pasaba al otro mundo. Era una medicina que conectaba a las personas con su corazón, con la comunidad y con lo divino.


Sin embargo, con el tiempo, la forma de celebrar ha cambiado radicalmente. Hoy en día, muchas celebraciones han sido reemplazadas por el consumo de alcohol y productos ultraprocesados llenos de azúcar. En lugar de conectar con la esencia de la celebración, estas sustancias suelen desconectar a las personas de su verdadero sentir.


Y me gustaría hacerte una pregunta, ¿Te gustan las celebraciones tal y como las hacemos a día de hoy? Creo que es bueno que reflexionemos acerca de esto de nuestra forma de celebrar, desde el bautizo hasta la muerte. Recuperar el cacao en su forma ceremonial es volver a una forma de celebración consciente, donde el corazón se abre sin intoxicaciones externas.



El Cacao como Puente Sagrado para el Encuentro y la Conexión

En muchas comunidades indígenas, el cacao no es solo una bebida, sino un espíritu guía que abre el corazón y revela la verdadera esencia de cada persona. Cuando un forastero llegaba, cuando alguien se iba a casar o cuando un nuevo amigo aparecía en la comunidad, los abuelos y abuelas realizaban un encuentro de tres días bebiendo cacao juntos.


Este tiempo de comunión no solo servía para conocerse a nivel humano, sino también para percibir, a través del corazón, la verdadera naturaleza del otro. El cacao suavizaba las barreras, despertaba la intuición y permitía ver más allá de las palabras. Así, se decidía si esa persona era digna de confianza, si podía integrarse a la comunidad o si estaba destinada a compartir su vida con alguien del pueblo.

Más que una ceremonia, era un portal a la verdad del alma.


El Cacao y el Oro: Dos Formas de Riqueza

Cuando los conquistadores vieron a los indígenas intercambiando granos de cacao con tanto cuidado, al principio no le dieron importancia. Creían que el oro era la única forma de riqueza verdadera. Sin embargo, con el tiempo comprendieron el poder económico y ritual del cacao, y comenzaron a llevarlo a Europa, donde se transformó en un producto de lujo.


Para los mayas y los aztecas, el cacao no solo era un alimento sagrado, sino también una moneda de cambio. Mientras los europeos valoraban el oro como símbolo de riqueza material, las civilizaciones mesoamericanas consideraban que la verdadera riqueza estaba en el cacao, porque:

Era un regalo de los dioses: Se creía que Quetzalcóatl había traído el cacao a la humanidad como un obsequio divino.

Se usaba como moneda: En la economía azteca y maya, los granos de cacao servían como dinero para intercambiar bienes y pagar tributos. Ejemplo:

100 granos de cacao podían comprar un esclavo.

3 granos de cacao bastaban para comprar un aguacate.

Se usaba en rituales y ceremonias: El cacao era esencial en ofrendas a los dioses y ceremonias de iniciación.



Propiedades del Cacao: Medicina de la Tierra

El cacao es un regalo de la naturaleza que ha sido cultivado y reverenciado por generaciones. Los abuelos han rezado al cacao, agradeciendo su espíritu y su energía expansiva. Este fruto se obtiene del árbol Theobroma cacao, cuyo nombre significa "alimento de los dioses". Su cultivo requiere un ambiente cálido y húmedo, en los cacaotales, donde las comunidades han cuidado su crecimiento con respeto y gratitud.

Existen tres variedades principales de cacao:


Cacao Criollo: Es el más puro y de mayor calidad, con un sabor suave y menos amargo. Es el utilizado en las ceremonias.

Cacao Forastero: Es más común y resistente, pero menos aromático.

Cacao Trinitario: Híbrido entre el Criollo y el Forastero, con buen equilibrio entre sabor y resistencia.


El cacao ceremonial que se usa en los rituales es puro, sin aditivos ni procesos industriales, respetando su esencia original. Además de su conexión espiritual, es un poderoso superalimento, rico en magnesio, antioxidantes, vitamina C, cafeína, teobromina y anandamida, compuestos que aportan bienestar, relajación, claridad mental y apertura del corazón. En muchas culturas, también se considera importante la fase lunar en la que se recolecta, pues se cree que influye en su energía y propiedades.


El cacao activa el sistema circulatorio principalmente a través de sus compuestos bioactivos, como los flavonoides, la teobromina y la feniletilamina, que favorecen la vasodilatación, mejoran el flujo sanguíneo y tienen efectos positivos en el corazón y el cerebro.


Entre sus propiedades puede estimular la neuroplasticidad, regenerar neuronas y aliviar trastornos como la depresión, la ansiedad y el estrés postraumático. La medicina moderna ya investiga su potencial como terapia alternativa frente a tratamientos convencionales y el futuro es prometedor.


Producción de hormonas del bienestar:

Feniletilamina (PEA): Neurotransmisor que mejora el estado de ánimo y produce sensación de bienestar.

Serotonina y dopamina: El cacao estimula su liberación, reduciendo el estrés y promoviendo la felicidad.

Oxitocina: Relacionada con el amor y la conexión social, lo que explica su uso en ceremonias de apertura del corazón.


Tomando el cacao crudo podremos beneficiarnos de una mejora la oxigenación de los tejidos.

  • Reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

  • Aumenta la energía y la vitalidad.

  • Mejora la concentración y el rendimiento mental.

  • Favorece el bienestar emocional.



Dosis recomendadas en ceremonias

Microdosis (uso diario o meditativo): 5g - 10g

Dosis media (conexión y trabajo ligero): 15g - 25g

Dosis ceremonial (rituales profundos): 40g - 50g

Dosis alta (no recomendada para todos): 55g - 70g


Personas que deben evitar el consumo de cacao en dosis ceremoniales

Problemas cardíacos graves: El cacao contiene teobromina, que puede estimular el corazón y aumentar el ritmo cardíaco.

Hipertensión arterial no controlada: La teobromina puede elevar la presión arterial.

Uso de antidepresivos tipo IMAO o ISRS: El cacao puede aumentar los niveles de serotonina, lo que podría provocar el síndrome serotoninérgico al combinarse con estos medicamentos.

Embarazo: El consumo excesivo de cacao puede aumentar los niveles de oxitocina, hormona que induce las contracciones uterinas, lo que podría adelantar el parto.

Además, la cafeína presente en el cacao puede aumentar el riesgo de parto prematuro.

Lactancia: La teobromina y la cafeína pueden pasar al bebé a través de la leche materna, afectando su sistema nervioso.

Epilepsia: La estimulación del sistema nervioso central por el cacao podría aumentar el riesgo de convulsiones.

Sensibilidad a la cafeína o teobromina: Puede causar ansiedad, insomnio o taquicardia.

Ayuno prolongado: Consumir cacao sin haber ingerido alimentos puede provocar mareos o malestar.


La fase de la luna ideal

Para realizar una ceremonia de cacao depende de la intención de la ceremonia:

🌑 Luna Nueva – Para nuevos comienzos, intenciones y manifestaciones.

  • Ideal para sembrar propósitos y abrirse a nuevas experiencias.

  • Se usa el cacao para visualizar metas y conectar con la intuición.

🌔 Luna Creciente – Para expansión y crecimiento.

  • Buen momento para fortalecer proyectos y relaciones.

  • Se trabaja con la energía del cacao para potenciar la creatividad y la motivación.

🌕 Luna Llena – Para celebraciones, gratitud y liberación emocional.

  • Se dice que el cacao potencia su efecto bajo la luna llena.

  • Ideal para conectar con el amor, la apertura del corazón y la comunidad.

🌖 Luna Menguante – Para soltar, sanar y limpiar energías.

  • Se usa el cacao para cerrar ciclos, liberar emociones y sanar heridas.

  • Buen momento para ceremonias más introspectivas.

Conclusión:La luna llena es la más común para ceremonias de cacao, ya que potencia la energía del corazón y la conexión con los demás. Sin embargo, la elección depende de la intención personal o grupal.


Desarrollo de la Ceremonia

Apertura del Círculo: Se inicia con una meditación o un canto para conectar con la energía del grupo.

Intención: Cada participante establece su intención para la ceremonia.

Ofrendas a la Tierra: Flores, semillas, tabaco o copal como símbolo de gratitud.

Fuego sagrado: Se encienden velas o fogatas para representar la transformación.

Cristales y piedras: Para amplificar la energía e intención de la ceremonia.

Inciensos o sahumerios: Copal, palo santo, salvia o mirra para limpiar el espacio energético.

Bebida del Cacao: Se toma lentamente, sintiendo su sabor y su efecto en el cuerpo.

Meditación guiada: Para conectar con la intención y abrir el corazón.

Tambor chamánico: Marca el ritmo y ayuda a conectar con estados meditativos.

Respiración consciente (pranayama): Ayuda a profundizar en el estado de expansión.

Cantos medicina y mantras: Elevan la vibración del grupo y crean unidad.

Danza libre o movimiento corporal: Permite integrar la energía y soltar bloqueos.

Ruedas de palabra: Espacio para compartir experiencias y reflexiones.

Interpretación de sueños y visiones: Después de consumir el cacao, se prestaba atención a los mensajes recibidos en estados meditativos o en sueños, ya que se creía que el espíritu del cacao transmitía sabiduría en estos momentos.

Cierre: Se comparte comida, se celebra el nuevo ciclo y se agradece por el aprendizaje recibido.


Realizar una ceremonia de cacao con respeto y presencia permite recuperar su esencia como una herramienta de conexión espiritual y comunitaria. Al beberlo conscientemente, honramos su historia y permitimos que nos guíe hacia una celebración más auténtica y alineada con el corazón.



Las ceremonias de cacao nos invitan a volver a lo esencial, a celebrar con conciencia y a abrirnos a una experiencia más profunda con nosotros mismos y con los demás. Recuperemos este ritual sagrado con el respeto que merece y permitamos que nos conduzca a un estado de conexión y amor.


¡TE SALUDO DESDE EL CORAZON!

GASSHO


Te invito a ver el vídeo sobre este tema en mi canal: https://youtu.be/KAMvmFP6TIk?si=48AIbJH9xyyDPL3q


Comments

Rated 0 out of 5 stars.
No ratings yet

Add a rating
bottom of page